26/04/2024 - Edición Nº1969

Policiales | 2 jul 2017

Intentó denunciar un caso de abuso pero finalmente todo se habría tratado de una falsa acusación



Una mujer junto a un grupo de militantes feministas, acusó a un oficial por acosarla cuando intentaba denunciar un caso de violencia de género en la Comisaría de la Mujer y la familia de Cañuelas. Con las horas descubrieron que había un "vínculo consentido" entre ambos y el hombre fue separado de la fuerza. Aseguran que las militantes se fueron del lugar al descubrir la verdad.
 
A fines de la semana pasada, una vecina del barrio Libertad se acercó a la Comisaría de la Mujer de Cañuelas (Av. Libertad 1263) para denunciar a su pareja por violencia de género. En el lugar, dos oficiales la recibieron y tomaron su caso. Uno de ellos fue acusado 48hs después por la mujer, aludiendo que la acosaba telefónicamente. Autoridades de la Superioridad policial tomaron la decisión de separar de la dependencia al acusado, al menos hasta que se esclarezca el caso.  
 
El sábado por la tarde, en la puerta de la comisaría, la agrupación "FURIA FEMINISTA" se reunió para apoyar a la denunciante. Este grupo defendió hasta último momento la versión que les había comentado la denunciante (C.L), pero todo cambió cuando se enteraron que había más detalles en esta historia, aseguraron fuentes de la Comisaría de la Muejr.
 
Cintia L. de 26 años intentó acusar al oficial Paez de acosarla sexualmente con mensajes y llamados. Decidió acercarse a la Comisaría junto a la agrupación que la acompañaba ya que en medio de este confuso caso y su denuncia por VIOLENCIA DE GENERO (contra su pareja) Cintia habría recibido una AMENAZA telefónica. En su momento creyó que que era el oficial quien la amenazaba por haber sido separado de la fuerza, pero con las horas se pudo saber que solo era una falsa acusación.
 
"Todo era muy ambiguo", explicaron las autoridades a Cañuelas al día". "Ella no podía explicarles a esta agrupacion feminista que la acompañaba cual era el vínculo real con el hombre". Al acercarse a la puerta de la Comisaría, la mujer entró en una crisis de llanto y se mostraba arrepentida de estar allí. 

En el interior de la comisaría, la mujer debió ser atendida por una crisis de nervios. Junto a ella se encontraba la comisario Natalia Álvarez, miembros de la agrupación a modo de testigos y demás oficiales que le tomaban su denuncia.
 
“Ella respondía los mensajes de Paez y se mandaban fotos. Había un ida y vuelta en varios diálogos por mensajes a pesar que eran subidos de tono”, explicaron las autoridades a Cañuelas al día. Aunque en todo momento explican  y remarcan que ante la dedicación y el trabajo de la dependencia ante casos como este no corresponde que  ninguno de los efectivos policiales mantenga un vínculo con víctimas o imputados más allá de lo profesional.
 
Ahora interviene en el caso la UFI2 a cargo de la Dra. Pipo. Y para definir cuál será el destino del oficial  se pidió la intervención de Asuntos internos. 

Fuente: Comisaría de la Mujer y la familia
MÁS NOTICIAS